Rabilargo - Cyanopica cyanus
Amamos el azul, dicen los pintores porque es siempre azul y porque, añaden los biólogos, los vertebrados carecemos de la capacidad de fabricar pigmentos azules. Amamos el azul, dice la estadística, por encima de cualquier otro color porque lo asociamos a cielos radiantes y agua limpia. Estos rabilargos tan esbeltos y bellos tienen la suerte de poseer un plumaje extraño y exótico: azul, crema y rosado. Es la pura y alegre luz sobre sus plumas la que arranca destellos tan hermosos del color menos frecuente de la naturaleza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario